Daniel Galantz es un fantástico humorista gráfico que los que siguen este blog ya conocerán. Para los que no lo conozcan recomiendo que visitéis su blog GALANTZ.

Pues bien, cual fue mi sorpresa cuando hace unos días abrí mi correo y vi un mensaje suyo en el que me enviaba un bonito diseño para El Microrrelatista. Me gustó mucho y es el que podéis ver en la cabecera de esta página.

¡Gracias Daniel!

viernes, 29 de octubre de 2010

Cosas de hadas



Estaba tan triste el cuentacuentos, que una de las hadas de las Mil y una Noches se apiadó de él, quiso saber qué lo agobiaba... sufría porque nadie le prestaba debida atención cuando hablaba, se sentía despreciado. Un dorado conjuro se escuchó en silencio y al cuentacuentos dormido lo cubrió un fino polvo de estrellas. Al día siguiente, sin sospechar lo que había pasado, bajó a la cafetería y como siempre, pidió un café
"Buenos días, me das mi café por favor?"
Apenas pronunció esas palabras, se hizo silencio y todos los que allí estaban, se acercaron a él, lo rodearon y empezaron a aplaudir arrobados... jamás habían escuchado palabras más bonitas.

artistalight :)

9 comentarios:

bicefalepena dijo...

No me extraña nada, es que pide el café con tanta gracia...
Una ovación para ti y un gran aplauso.
Un abrazo

artistalight dijo...

jjajaja Hasta tus comentarios son excelentes, gracias Bicefalapena ;)

Doctor Krapp dijo...

Un texto digno de un buen cuentacuentos, si señor. Felicidades.

artistalight dijo...

:) Gracias Doctor.

Unknown dijo...

Retratas bien éstos tremendos vacíos que impulsan a perseguir la fama y la atención del público.
No cabe duda que el arte nace de una traumática personal compleja.
Esa hambre de gloria para justificar la propia validez.

HÉCTOR LUIS RIVERO LÓPEZ dijo...

"...y que sea con leche y azúcar de dieta que te tengo que contar algo que me pasó a mi hace mucho tiempo.... " Muy bien María Luisa, te envio un beso.

artistalight dijo...

Si Carlos, creo que el artista siempre es inseguro...pero esa misma inseguridad es un impulso para crear sin descanso, buscando la obra perfecta, la aceptación o solamente una palabra gentil y entonces el artista por efímeros momentos es el más feliz del mundo... Gracias :)

Querido Héctor, sabía que usted aprovecharía para contarle a los panaderos y a los clientes de la cafetería...una de sus bellas historias :)

Kum* dijo...

Me ha encantado, Artista. Sobre todo el último párrafo. Tal vez al inicio del relato le sobren palabras,... está como demasiado explicado. Pero la historia es buenísima y el final, como te digo, redondo.

Sorprendente y divertido.

Besos de mar.

artistalight dijo...

Gracias Kum, algún día sabré ser más concisa, lo prometo :)

Decálogo para escribir microcuentos (Robado de la Escuela de escritores)


1. Un microcuento es una historia mínima que no necesita más que unas pocas líneas para ser contada, y no el resumen de un cuento más largo.

2. Un microcuento no es una anécdota, ni una greguería, ni una ocurrencia. Como todos los relatos, el microcuento tiene planteamiento, nudo y desenlace y su objetivo es contar un cambio, cómo se resuelve el conflicto que se plantea en las primeras líneas.

3. Habitualmente el periodo de tiempo que se cuente será pequeño. Es decir, no transcurrirá mucho tiempo entre el principio y el final de la historia.

4. Conviene evitar la proliferación de personajes. Por lo general, para un microcuento tres personajes ya son multitud.

5. El microcuento suele suceder en un solo escenario, dos a lo sumo. Son raros los microcuentos con escenarios múltiples.

6. Para evitar alargarnos en la presentación y descripción de espacios y personajes, es aconsejable seleccionar bien los detalles con los que serán descritos. Un detalle bien elegido puede decirlo todo.

7. Un microcuento es, sobre todo, un ejercicio de precisión en el contar y en el uso del lenguaje. Es muy importante seleccionar drásticamente lo que se cuenta (y también lo que no se cuenta), y encontrar las palabras justas que lo cuenten mejor. Por esta razón, en un microcuento el título es esencial: no ha de ser superfluo, es bueno que entre a formar parte de la historia y, con una extensión mínima, ha de desvelar algo importante.

8. Pese a su reducida extensión y a lo mínimo del suceso que narran, los microcuentos suelen tener un significado de orden superior. Es decir cuentan algo muy pequeño, pero que tiene un significado muy grande.

9. Es muy conveniente evitar las descripciones abstractas, las explicaciones, los juicios de valor y nunca hay que tratar de convencer al lector de lo que tiene que sentir. Contar cuentos es pintar con palabras, dibujar las escenas ante los ojos del lector para que este pueda conmoverse (o no) con ellas.

10. Piensa distinto, no te conformes, huye de los tópicos. Uno no escribe (ni microcuentos ni nada) para contar lo que ya se ha dicho mil veces.


Envía tus microrrelatos de no más de 200 palabras a elmicrorrelatista@gmail.com. Se irán publicando los mejores.