Por estas fechas
Al
llegar se encontraron las persianas bajadas, penumbra espesa y ese olor dulzón
que según las novelas del género siempre anuncia la muerte. Un piso de dos
habitaciones, salón, cocina y un baño. En ambos dormitorios, el de matrimonio y
el que evidenciaba ser el del crío, con un papel azul hasta media pared y una
cenefa con dibujos de nubes, los cajones estaban abiertos y vacíos. Durante
todo el recorrido que los agentes hicieron por la vivienda, un gato les persiguió
algo inquieto, maullando y colándoseles por entre las piernas. El tintineo del
cascabel, junto con su desesperante quejido, rompía burlonamente el silencio
clínico de aquella inspección ocular.
En
el salón se encontraron el televisor encendido, con niebla en la pantalla.
Junto al reproductor del dvd uno de
los agentes encontró la carátula abierta de una película de Frank Capra, y
entre los dedos rígidos del hombre que yacía desangrado vena abajo en el sofá,
una carta de despedida firmada por una tal Anabel, que terminaba con estas dos
frases: "Y ahí te quedas
con tu puto gato, mamón. Feliz Navidad.".
Lo
primero que ordenó el sargento fue que le pusieran agua al minino, a ver si
conseguían callarlo de una vez por todas.
Autor: Raúl Ariza.
Blog: El Alma difusa
Relato publicado en el libro "La suave piel de la anaconda"
Pintura: "Gato negro de ojos verdes" de Iga Terlecka
Autor: Raúl Ariza.
Blog: El Alma difusa
Relato publicado en el libro "La suave piel de la anaconda"
Pintura: "Gato negro de ojos verdes" de Iga Terlecka
2 comentarios:
Por algo se empieza...Saludos
Me encanta tu novela policiaca,corta y intensa . bravo !
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