Daniel Galantz es un fantástico humorista gráfico que los que siguen este blog ya conocerán. Para los que no lo conozcan recomiendo que visitéis su blog GALANTZ.

Pues bien, cual fue mi sorpresa cuando hace unos días abrí mi correo y vi un mensaje suyo en el que me enviaba un bonito diseño para El Microrrelatista. Me gustó mucho y es el que podéis ver en la cabecera de esta página.

¡Gracias Daniel!

viernes, 2 de diciembre de 2011

Retorno a la Nada

Señoras y señores. Bienvenidos a la Nada. Desde aquí esperamos que hayan disfrutado de su paso por la vida. Sí, sí... ya sabemos que algunos creen que su viaje ha sido especialmente corto, aburrido o desgraciado pero esos asuntos no son de este negociado sino del que está justo al otro lado del pasillo: el Departamento de Azares y Destinos. Con todo, aquellos que se sienten defraudados, disgustados o especialmente estafados por lo que les deparó la vida pueden dejar sus reclamaciones en el stand de la entrada. 
Gracias
-------------------------------------------
Ladies and gentlemen. Welcome….

9 comentarios:

omar enletrasarte dijo...

tal como una oficina de quejas, que nada más recibe las mismas, pero jamás les da resolución
jeje
¡que nos espera!
saludos

Sergio DS dijo...

Que decepción, me habían dicho que aquí estaba el TODO.
Y encima no se puede repetir.

Unknown dijo...

Anticipo que la nada puede resultar especialmente tranquilo y en calma, no habrá frío, ni calor ,
ni ambiciones,ni preocupaciones, ni molestias, solo una relajante nada.

Miguel Ángel Pegarz dijo...

Me ha traído a la cabeza la frase de un amigo que siempre dice "verás todos estos cuando se mueran y se los coman los gusanos y vean que no pasa nada. La cara que se les va a quedar".

Pedro Sánchez Negreira dijo...

Lo primero que me vino a la mente es el argumento al que siempre me abrazo cuando se habla del más allá. No recordamos la nada anterior a estar aquí, dudo que encontremos algo más allá.

Una bienvenida a la nada de este estilo se agradecería.

Buen micro.

Un saludo,

Kum* dijo...

Sólo el que algo espera se defrauda o decepciona. Vivamos, pues, cada día... y bástele a cada día su cuidado.

Buenísimo, mi admirado Dr.

Besos payasos.

Unknown dijo...

Mi querido doctor, Ahora sí que te excediste en los terrenos de la profundidad de la nada,; tan compleja, tan veleidosa . tan indefinida. ¿Es algo la nada?
¿Y si en verdad es nada, significa que no existe? ¿O es meramente una nadería?
¿Es un pleonasmo decir, nada de nada? Digo, no puede haber algo de nada. Ésto convertiría a la nada en algo divisible. Se pudiera porcionar y hasta repartir.
Hasta donarla en exceso y lanzarles a todos toneladas de nada.
Y sin embargo la nada , tan generosa, es inocua, curativa; como a través del ayuno en que no tomas ni comes nada. No pesa, no abruma, no sofoca.
Creo que hay más problemas con el algo.

ISIS dijo...

La Nada y las reclamaciones...
Como la vida misma.

Saludos.

Anónimo dijo...

Cuando llegué a "su paso por la vida" no necesitaba más, ya estaba totalmente desconsolada.

Decálogo para escribir microcuentos (Robado de la Escuela de escritores)


1. Un microcuento es una historia mínima que no necesita más que unas pocas líneas para ser contada, y no el resumen de un cuento más largo.

2. Un microcuento no es una anécdota, ni una greguería, ni una ocurrencia. Como todos los relatos, el microcuento tiene planteamiento, nudo y desenlace y su objetivo es contar un cambio, cómo se resuelve el conflicto que se plantea en las primeras líneas.

3. Habitualmente el periodo de tiempo que se cuente será pequeño. Es decir, no transcurrirá mucho tiempo entre el principio y el final de la historia.

4. Conviene evitar la proliferación de personajes. Por lo general, para un microcuento tres personajes ya son multitud.

5. El microcuento suele suceder en un solo escenario, dos a lo sumo. Son raros los microcuentos con escenarios múltiples.

6. Para evitar alargarnos en la presentación y descripción de espacios y personajes, es aconsejable seleccionar bien los detalles con los que serán descritos. Un detalle bien elegido puede decirlo todo.

7. Un microcuento es, sobre todo, un ejercicio de precisión en el contar y en el uso del lenguaje. Es muy importante seleccionar drásticamente lo que se cuenta (y también lo que no se cuenta), y encontrar las palabras justas que lo cuenten mejor. Por esta razón, en un microcuento el título es esencial: no ha de ser superfluo, es bueno que entre a formar parte de la historia y, con una extensión mínima, ha de desvelar algo importante.

8. Pese a su reducida extensión y a lo mínimo del suceso que narran, los microcuentos suelen tener un significado de orden superior. Es decir cuentan algo muy pequeño, pero que tiene un significado muy grande.

9. Es muy conveniente evitar las descripciones abstractas, las explicaciones, los juicios de valor y nunca hay que tratar de convencer al lector de lo que tiene que sentir. Contar cuentos es pintar con palabras, dibujar las escenas ante los ojos del lector para que este pueda conmoverse (o no) con ellas.

10. Piensa distinto, no te conformes, huye de los tópicos. Uno no escribe (ni microcuentos ni nada) para contar lo que ya se ha dicho mil veces.


Envía tus microrrelatos de no más de 200 palabras a elmicrorrelatista@gmail.com. Se irán publicando los mejores.