Daniel Galantz es un fantástico humorista gráfico que los que siguen este blog ya conocerán. Para los que no lo conozcan recomiendo que visitéis su blog GALANTZ.

Pues bien, cual fue mi sorpresa cuando hace unos días abrí mi correo y vi un mensaje suyo en el que me enviaba un bonito diseño para El Microrrelatista. Me gustó mucho y es el que podéis ver en la cabecera de esta página.

¡Gracias Daniel!

miércoles, 2 de febrero de 2011

La soñé

Salí corriendo al ver que te habías ido. No te encontré. Hoy sólo me queda la esperanza en que algún día regresarás. Ese día es mi ilusión, ese día es mi esperanza. Vuelve pronto amada mía.

De repente, de repente desperté.

-¿Quién se fue escritor?

-No se musa, jamás vi su rostro o quizá no lo recuerdo. Tenía silueta de mi futura amada.

-¿Y cómo es ella?

-Hermosa, radiante. Cómo de sueño, en un sueño la hallé, en un sueño la amé.

-Quizá los sueños inspiran un futuro, quizá los sueños son ese algo que se cumplirá…

El escritor.

Daniel J. Hernández R.

6 comentarios:

Unknown dijo...

Se ha escrito tanto acerca de los sueños que ya no se sabe si tienen interpretación o son un licuado de la mente que funciona en off.

Anónimo dijo...

Que bonito :)

Doctor Krapp dijo...

Los sueños son un mundo paralelo al real. Cada cosa debe permanecer en su sitio.

sombrasenllamas dijo...

Los amores en sueños son perfectos, inolvidables.
Todavía recuerdo un amor de unos minutos hace casi quince años, entre un abrir y cerrar de ojos dejó una huella tan profunda como de tres centímetros.
Cuando llegue a la morgue, seguro lo notarán.
Saludos!

Unknown dijo...

A mí también me gusta pensar que hay cierta magia en los sueños.
Un abrazo Daniel

artistalight dijo...

Más que amor es el anhelo de amar, muy bonito Daniel.

Decálogo para escribir microcuentos (Robado de la Escuela de escritores)


1. Un microcuento es una historia mínima que no necesita más que unas pocas líneas para ser contada, y no el resumen de un cuento más largo.

2. Un microcuento no es una anécdota, ni una greguería, ni una ocurrencia. Como todos los relatos, el microcuento tiene planteamiento, nudo y desenlace y su objetivo es contar un cambio, cómo se resuelve el conflicto que se plantea en las primeras líneas.

3. Habitualmente el periodo de tiempo que se cuente será pequeño. Es decir, no transcurrirá mucho tiempo entre el principio y el final de la historia.

4. Conviene evitar la proliferación de personajes. Por lo general, para un microcuento tres personajes ya son multitud.

5. El microcuento suele suceder en un solo escenario, dos a lo sumo. Son raros los microcuentos con escenarios múltiples.

6. Para evitar alargarnos en la presentación y descripción de espacios y personajes, es aconsejable seleccionar bien los detalles con los que serán descritos. Un detalle bien elegido puede decirlo todo.

7. Un microcuento es, sobre todo, un ejercicio de precisión en el contar y en el uso del lenguaje. Es muy importante seleccionar drásticamente lo que se cuenta (y también lo que no se cuenta), y encontrar las palabras justas que lo cuenten mejor. Por esta razón, en un microcuento el título es esencial: no ha de ser superfluo, es bueno que entre a formar parte de la historia y, con una extensión mínima, ha de desvelar algo importante.

8. Pese a su reducida extensión y a lo mínimo del suceso que narran, los microcuentos suelen tener un significado de orden superior. Es decir cuentan algo muy pequeño, pero que tiene un significado muy grande.

9. Es muy conveniente evitar las descripciones abstractas, las explicaciones, los juicios de valor y nunca hay que tratar de convencer al lector de lo que tiene que sentir. Contar cuentos es pintar con palabras, dibujar las escenas ante los ojos del lector para que este pueda conmoverse (o no) con ellas.

10. Piensa distinto, no te conformes, huye de los tópicos. Uno no escribe (ni microcuentos ni nada) para contar lo que ya se ha dicho mil veces.


Envía tus microrrelatos de no más de 200 palabras a elmicrorrelatista@gmail.com. Se irán publicando los mejores.