"Los recuerdos pueden tener colores. Sólo si tú los piensas y ves con los ojos del adentro", me dijo un día, un sabio maestro de yoga. Ayer, mientras miraba el mar embravecido y escuchaba las sirenas de las ambulancias presagiando un accidente a mis espaldas, recordé a Clara, como todos los días de mi vida.
_ ¿Cómo sería Clara con diez años más? Clara, tan pelirroja, tan obcecada, tan amante, tan. . .¡Cómo la amaba!
El tiempo ha pasado y ella sigue habitando en mi mente.
_ Es hora de regresar, pensé, cuando el mar se tiñó de rojo. Recordé la casa, siempre igual, y la oscuridad pintó todo de negro. Hoy, desperté en medio de una bruma dorada y vi el sol. Estaba recordando a nuestra hija.
4 comentarios:
Recuerdos en color, ahora lo pienso y creo que algunos recuerdos apasionados, por motivos diversos, los recuerdo en color.
Besos, Millz.
Conmovedor, sí creo que el color pinta todos nuestros sentimientos.
Es muy duro perder un hijo. No puede olvidarse nunca, esa triste sensación de cómo sería si aún estuviera vivo.
Gracias a todos, de corazón.
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