Daniel Galantz es un fantástico humorista gráfico que los que siguen este blog ya conocerán. Para los que no lo conozcan recomiendo que visitéis su blog GALANTZ.

Pues bien, cual fue mi sorpresa cuando hace unos días abrí mi correo y vi un mensaje suyo en el que me enviaba un bonito diseño para El Microrrelatista. Me gustó mucho y es el que podéis ver en la cabecera de esta página.

¡Gracias Daniel!

jueves, 17 de mayo de 2012

Sombras de acuarela


Sueños blancos, blancos versos, de piel blanca y sombras de acuarela. Me gusta regalarte palabras, nadar en ti, volar contigo, buscar tesoros ocultos y descubrirte en nuevos mares. Me gusta tu risa, pero algunas veces te escapas de mi memoria y revoloteas en algún lugar de mi pensamiento y, en ese instante, siento que  huye tu arrullo, tu espíritu, tu esencia. Te pienso y me azota ese vértigo del encuentro, de la proximidad, de tu cercanía, ese destello cuando nuestras fragancias interseccionen y me eclipses con tu mirada.

Anhelo descubrir la geografía de tu alma,  pasear juntos por esos sueños que habitas y batir mis aguas en tu acantilado. Quizás solo acurrucarme en tu orilla. Algunas veces, cuando la fantasía se desvanece y la desesperanza me abate, descubro que sólo eres un trazo, un dibujo, una espiral, un signo, tal vez una hipérbole y, por más que lo intento, por más que estiro mis manos no puedo alcanzar la línea imaginaria de tu contorno, ni siquiera rozar tus fronteras. Y te siento un ave imposible en migración constante.  Yo sólo quiero tenerte siempre reflejada en mis ojos: sueños blancos, blancos versos, de piel blanca y sombras de acuarela.

©  Xavier Blanco 2012.


15 comentarios:

Pilar Arenas Nieto dijo...

Precioso Xavier. ¿Acaso es la inspiración? Porque sería una estupenda descripción.

Petra Acero dijo...

Xavier, enhorabuena.
¡Me ha encantado!
En otro momento te hice llegar mi opinión sobre este relato:
Sutil, sensible, rápido, derrotado, transparente, realista, alegre, triste, soñador,... blanco.

El BLANCO, en los colores "luz", es la suma de todos los colores.
El BLANCO, en acuarela, es el fondo del papel. Sin pigmento, limpio, sin "color".

Tu narración poética o prosa poética es "blanca".
¡Qué acierto en la elección!
Lo tiene todo... y nada:
"Yo sólo quiero tenerte siempre reflejada en mis ojos: sueños blancos, blancos versos, de piel blanca y sombras de acuarela."
Precioso, profundo, poético.

Xavier, como siempre, como nos tienes acostumbrados: genial.

¡FELICIDADES!

Un abrazo.

Sara Lew dijo...

Uy, qué romántico. Muy bello.
Un abrazo.

Rosa dijo...

Un texto muy bello Xavier, lleno de imágenes.

Besos desde el aire

Deli Ruiz dijo...

Pureza pura en tus palabras Xavier. ¡Hermoso!Una especial descripción del amor.

Sandra Montelpare dijo...

Textazo, Xavier! Touchè

Laura dijo...

Imaginar a alguien como una sombra de acuarela, es algo imposible. Porque las acuarelas nunca son sombras, sólo las crean.

Imaginar a alguien como un trazo, un dibujo, una espiral, un signo o una hipérbole ...es algo muy posible, porque todos tenemos un poquito de "sombra inalcanzable" que nos proteje de esas líneas imaginarias o fronteras que colocamos nosotros mismos.

Un ave en migración constante es el símbolo de algo que se escapa, pero que puede fluctuar en nuestra imaginación traspasando las barreras que un día pusimos.

Xavier, es un texto muy romántico, lleno de encanto y en el que has volcado una gran sensibilidad.

Felicidades por el texto, y luego paso por tu blog.

MJ dijo...

¡Qué maravilla de texto, Xavier!
Una vorágine de sentimientos plasmados en el papel con delicadeza y arte.
Te felicito.

Un abrazo.

Yashira dijo...

Hermosa prosa llena de poesía, creo que de todo lo que te he leído Xavier, es lo más romántico, tan suave y lleno de anhelo, deseo y a la vez ese temor a que se desvanezca. Me gustó mucho este relato.

Un abrazo desde mi mar,

JUAN-LUIS dijo...

Precioso, desde el título hasta el pensamiento en el que uno flota al final.

Un abrazo!!!

Miguel Ángel Pegarz dijo...

Delicioso bocado de prosa poética.

Mar Horno dijo...

Nadie expone como tú los sentimientos. Los muestras ante nosotros revestidos de tal poesía, que nos parecen caramelos. Los chupamos, los lamemos y nos deja un regusto a veces dulce, a veces, amargo, pero siempre adictivo. Un abrazo.

Unknown dijo...

Pues después de llegar aquí y leer tu texto sólo puedo decir que el título es un acierto. Hace poco pensaba que algún día debería intentar escribir sobre un sentimiento del que nunca he escrito. Tú lo haces aquí de forma magistral, como ya han dicho antes de mí: Prosa poética... Poesía en frases en lugar de en versos, porque quieres mostrárnoslo así...
Enhorabuena por la selección en este insigne Blog de microrrelatos.
http://espiralesdetinta.blogspot.com.es/

Juan Esteban Bassagaisteguy dijo...

Deliciosa prosa.
Saludos.

Anónimo dijo...

Perseguir la inspiración por los infinitos de la imaginación, dar con la palabra precisa que genere una emoción, hacer que el verbo se haga carne.
El eterno desafio frente al espacio en blanco.

Decálogo para escribir microcuentos (Robado de la Escuela de escritores)


1. Un microcuento es una historia mínima que no necesita más que unas pocas líneas para ser contada, y no el resumen de un cuento más largo.

2. Un microcuento no es una anécdota, ni una greguería, ni una ocurrencia. Como todos los relatos, el microcuento tiene planteamiento, nudo y desenlace y su objetivo es contar un cambio, cómo se resuelve el conflicto que se plantea en las primeras líneas.

3. Habitualmente el periodo de tiempo que se cuente será pequeño. Es decir, no transcurrirá mucho tiempo entre el principio y el final de la historia.

4. Conviene evitar la proliferación de personajes. Por lo general, para un microcuento tres personajes ya son multitud.

5. El microcuento suele suceder en un solo escenario, dos a lo sumo. Son raros los microcuentos con escenarios múltiples.

6. Para evitar alargarnos en la presentación y descripción de espacios y personajes, es aconsejable seleccionar bien los detalles con los que serán descritos. Un detalle bien elegido puede decirlo todo.

7. Un microcuento es, sobre todo, un ejercicio de precisión en el contar y en el uso del lenguaje. Es muy importante seleccionar drásticamente lo que se cuenta (y también lo que no se cuenta), y encontrar las palabras justas que lo cuenten mejor. Por esta razón, en un microcuento el título es esencial: no ha de ser superfluo, es bueno que entre a formar parte de la historia y, con una extensión mínima, ha de desvelar algo importante.

8. Pese a su reducida extensión y a lo mínimo del suceso que narran, los microcuentos suelen tener un significado de orden superior. Es decir cuentan algo muy pequeño, pero que tiene un significado muy grande.

9. Es muy conveniente evitar las descripciones abstractas, las explicaciones, los juicios de valor y nunca hay que tratar de convencer al lector de lo que tiene que sentir. Contar cuentos es pintar con palabras, dibujar las escenas ante los ojos del lector para que este pueda conmoverse (o no) con ellas.

10. Piensa distinto, no te conformes, huye de los tópicos. Uno no escribe (ni microcuentos ni nada) para contar lo que ya se ha dicho mil veces.


Envía tus microrrelatos de no más de 200 palabras a elmicrorrelatista@gmail.com. Se irán publicando los mejores.