Daniel Galantz es un fantástico humorista gráfico que los que siguen este blog ya conocerán. Para los que no lo conozcan recomiendo que visitéis su blog GALANTZ.

Pues bien, cual fue mi sorpresa cuando hace unos días abrí mi correo y vi un mensaje suyo en el que me enviaba un bonito diseño para El Microrrelatista. Me gustó mucho y es el que podéis ver en la cabecera de esta página.

¡Gracias Daniel!

viernes, 10 de junio de 2011

El truco final

-¡Tachán!
Ni un solo aplauso. Alguien entre el público tosió. Millones de personas habían cambiado de canal. Aquel fue el momento menos visto de la cadena en todo el mes. Muy bien. Si lo que buscaban era audiencia, Gorzon el Mago les iba a dar audiencia. Él sabía lo que la gente estaba deseando ver. A la semana siguiente, después de convencerla durante una hora entera, su ayudante accedió a meterse desnuda en la caja. No quería que al cortarla por la mitad, la herida se infectase por culpa del vestido.

Budoson

8 comentarios:

Rosa dijo...

Jajaja. Si eso sangre y vísceras que es lo que sube las audiencias.
Muy bueno
Saludos desde el aire

Unknown dijo...

Que mago tan gore.
Retratas bien a éste desesperado del anonimato, y al último poder de las masas. El canalazo.

Jorge Solana dijo...

Tachán !! y la audiencia subió como la espuma, ¿verdad?

Gala dijo...

Que mago mas mediocre... Lo que no consigo entender es como se deja convencer la otra... hay cosas en esta vida sin explicación lógica.

Por un puñado de aplausos...

Miguel Ángel Pegarz dijo...

Cualquier día este relato queda basado en hechos reales.
Me gustó.

budoson dijo...

Rosa, Carlos, Jorge, Galatea, CYBRGHOST, gracias por vuestros comentarios. Y Jorge, sí, la audiencia subió, pero tampoco te creas que fue para tanto.

escarcha dijo...

jaja muy bueno!
yo seguramente habría visto el programa!

saludos

budoson dijo...

Gracias, Escarcha. Sí, claro, yo también. O me lo habría bajado.

Decálogo para escribir microcuentos (Robado de la Escuela de escritores)


1. Un microcuento es una historia mínima que no necesita más que unas pocas líneas para ser contada, y no el resumen de un cuento más largo.

2. Un microcuento no es una anécdota, ni una greguería, ni una ocurrencia. Como todos los relatos, el microcuento tiene planteamiento, nudo y desenlace y su objetivo es contar un cambio, cómo se resuelve el conflicto que se plantea en las primeras líneas.

3. Habitualmente el periodo de tiempo que se cuente será pequeño. Es decir, no transcurrirá mucho tiempo entre el principio y el final de la historia.

4. Conviene evitar la proliferación de personajes. Por lo general, para un microcuento tres personajes ya son multitud.

5. El microcuento suele suceder en un solo escenario, dos a lo sumo. Son raros los microcuentos con escenarios múltiples.

6. Para evitar alargarnos en la presentación y descripción de espacios y personajes, es aconsejable seleccionar bien los detalles con los que serán descritos. Un detalle bien elegido puede decirlo todo.

7. Un microcuento es, sobre todo, un ejercicio de precisión en el contar y en el uso del lenguaje. Es muy importante seleccionar drásticamente lo que se cuenta (y también lo que no se cuenta), y encontrar las palabras justas que lo cuenten mejor. Por esta razón, en un microcuento el título es esencial: no ha de ser superfluo, es bueno que entre a formar parte de la historia y, con una extensión mínima, ha de desvelar algo importante.

8. Pese a su reducida extensión y a lo mínimo del suceso que narran, los microcuentos suelen tener un significado de orden superior. Es decir cuentan algo muy pequeño, pero que tiene un significado muy grande.

9. Es muy conveniente evitar las descripciones abstractas, las explicaciones, los juicios de valor y nunca hay que tratar de convencer al lector de lo que tiene que sentir. Contar cuentos es pintar con palabras, dibujar las escenas ante los ojos del lector para que este pueda conmoverse (o no) con ellas.

10. Piensa distinto, no te conformes, huye de los tópicos. Uno no escribe (ni microcuentos ni nada) para contar lo que ya se ha dicho mil veces.


Envía tus microrrelatos de no más de 200 palabras a elmicrorrelatista@gmail.com. Se irán publicando los mejores.