Daniel Galantz es un fantástico humorista gráfico que los que siguen este blog ya conocerán. Para los que no lo conozcan recomiendo que visitéis su blog GALANTZ.

Pues bien, cual fue mi sorpresa cuando hace unos días abrí mi correo y vi un mensaje suyo en el que me enviaba un bonito diseño para El Microrrelatista. Me gustó mucho y es el que podéis ver en la cabecera de esta página.

¡Gracias Daniel!

miércoles, 28 de marzo de 2012

ESTATUARIA.

Sólo puedo decirles que Alicia fué la persona más maravillosa que jamás conocí.
Lo que prometió vestida , lo cumplió desnuda.

12 comentarios:

Lucas Fulgi dijo...

Jaja, con relatos así se dispara muchísimo la imaginación del lector... Puede haber prometido darse un baño, por ejemplo.

Lucas Fulgi dijo...

pdt: aunque con esa lectura, el título queda un poco fuera de lugar (en realidad, lo que queda fuera de lugar es la lectura).

Saludos

El Eskimal dijo...

Este pequeño cuento tiene un secreto en sí, aún no lo hallo, pero he ahí lo genial del mismo.

Pilar Arenas Nieto dijo...

¿Os imagináis en la misma situación a los políticos?...
Dejando la pregunta de lado, encuentro muy significativo el micro, la desnudez de Alicia también se puede interpretar como libre de pensamientos, de ataduras, con identidad propia y auténtica. Por otro lado, no me cuadra el título con el relato.

Paloma Hidalgo dijo...

Lástima entonces que hables de ella en pasado.

Saludos

Yashira dijo...

Pues a mi lo que me descuadra es el título, porque no imagino una estatua vestida... No se... Creo que tiene truco pero no lo averiguo, lo que está claro es que, indiferente no te deja, te quedas dándole vueltas al tema.

Saludos Carlos, buen micro...

Nicolás Jarque dijo...

Carlos, tuviste suerte, pues no todas las personas se comportan igual. Las hay que prometen mucho con vestimenta y pierden barbaridades desnudas.

Un abrazo.

omar enletrasarte dijo...

brevísimo y locuaz
saludos

josé manuel ortiz soto dijo...

Carlos, el título me hizo recordar a dos estatuas famosas: El príncipe Feliz y la de Don Gonzalo, el comendador. Así que, yo sí te creo el título.

Un saludo.

Anónimo dijo...

¡Ah una mujer de honor, honorable mujer!

Miguel Ángel Pegarz dijo...

Alicia se hace mayor y sus maravillas adultas :-)

Arturo dijo...

Demasiado ambiguo, da para cualquier interpretación.
Alicia puede ser una fértil mujer, pero también: una frígida, un travesti, una sádica, una masoquista, una ramera, una muñeca, etc.
El relator puede ser: un debutante, un maníaco sexual, un cliente, una lesbiana, un imbécil, un recién casado, etc.
Supongo que aquí no se agotan las opciones.
¿A cuál refiere el relato?

Decálogo para escribir microcuentos (Robado de la Escuela de escritores)


1. Un microcuento es una historia mínima que no necesita más que unas pocas líneas para ser contada, y no el resumen de un cuento más largo.

2. Un microcuento no es una anécdota, ni una greguería, ni una ocurrencia. Como todos los relatos, el microcuento tiene planteamiento, nudo y desenlace y su objetivo es contar un cambio, cómo se resuelve el conflicto que se plantea en las primeras líneas.

3. Habitualmente el periodo de tiempo que se cuente será pequeño. Es decir, no transcurrirá mucho tiempo entre el principio y el final de la historia.

4. Conviene evitar la proliferación de personajes. Por lo general, para un microcuento tres personajes ya son multitud.

5. El microcuento suele suceder en un solo escenario, dos a lo sumo. Son raros los microcuentos con escenarios múltiples.

6. Para evitar alargarnos en la presentación y descripción de espacios y personajes, es aconsejable seleccionar bien los detalles con los que serán descritos. Un detalle bien elegido puede decirlo todo.

7. Un microcuento es, sobre todo, un ejercicio de precisión en el contar y en el uso del lenguaje. Es muy importante seleccionar drásticamente lo que se cuenta (y también lo que no se cuenta), y encontrar las palabras justas que lo cuenten mejor. Por esta razón, en un microcuento el título es esencial: no ha de ser superfluo, es bueno que entre a formar parte de la historia y, con una extensión mínima, ha de desvelar algo importante.

8. Pese a su reducida extensión y a lo mínimo del suceso que narran, los microcuentos suelen tener un significado de orden superior. Es decir cuentan algo muy pequeño, pero que tiene un significado muy grande.

9. Es muy conveniente evitar las descripciones abstractas, las explicaciones, los juicios de valor y nunca hay que tratar de convencer al lector de lo que tiene que sentir. Contar cuentos es pintar con palabras, dibujar las escenas ante los ojos del lector para que este pueda conmoverse (o no) con ellas.

10. Piensa distinto, no te conformes, huye de los tópicos. Uno no escribe (ni microcuentos ni nada) para contar lo que ya se ha dicho mil veces.


Envía tus microrrelatos de no más de 200 palabras a elmicrorrelatista@gmail.com. Se irán publicando los mejores.