Porque amo a la flaquita.
Me cae en gracia.
Hago chistes acerca de ella.
Le provoco la risa.
Le pellizco una nalga.
Me curruco con ella al dormir.
Y la acaricio.
Me quiere así como soy, VIVO.
Aunque yo me la pase diciendo que me quedan quince minutos,
ella no me quiere llevar.
Pues bien, cual fue mi sorpresa cuando hace unos días abrí mi correo y vi un mensaje suyo en el que me enviaba un bonito diseño para El Microrrelatista. Me gustó mucho y es el que podéis ver en la cabecera de esta página.
¡Gracias Daniel!
viernes, 13 de enero de 2012
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Decálogo para escribir microcuentos (Robado de la Escuela de escritores)
1. Un microcuento es una historia mínima que no necesita más que unas pocas líneas para ser contada, y no el resumen de un cuento más largo.
2. Un microcuento no es una anécdota, ni una greguería, ni una ocurrencia. Como todos los relatos, el microcuento tiene planteamiento, nudo y desenlace y su objetivo es contar un cambio, cómo se resuelve el conflicto que se plantea en las primeras líneas.
3. Habitualmente el periodo de tiempo que se cuente será pequeño. Es decir, no transcurrirá mucho tiempo entre el principio y el final de la historia.
4. Conviene evitar la proliferación de personajes. Por lo general, para un microcuento tres personajes ya son multitud.
5. El microcuento suele suceder en un solo escenario, dos a lo sumo. Son raros los microcuentos con escenarios múltiples.
6. Para evitar alargarnos en la presentación y descripción de espacios y personajes, es aconsejable seleccionar bien los detalles con los que serán descritos. Un detalle bien elegido puede decirlo todo.
7. Un microcuento es, sobre todo, un ejercicio de precisión en el contar y en el uso del lenguaje. Es muy importante seleccionar drásticamente lo que se cuenta (y también lo que no se cuenta), y encontrar las palabras justas que lo cuenten mejor. Por esta razón, en un microcuento el título es esencial: no ha de ser superfluo, es bueno que entre a formar parte de la historia y, con una extensión mínima, ha de desvelar algo importante.
8. Pese a su reducida extensión y a lo mínimo del suceso que narran, los microcuentos suelen tener un significado de orden superior. Es decir cuentan algo muy pequeño, pero que tiene un significado muy grande.
9. Es muy conveniente evitar las descripciones abstractas, las explicaciones, los juicios de valor y nunca hay que tratar de convencer al lector de lo que tiene que sentir. Contar cuentos es pintar con palabras, dibujar las escenas ante los ojos del lector para que este pueda conmoverse (o no) con ellas.
10. Piensa distinto, no te conformes, huye de los tópicos. Uno no escribe (ni microcuentos ni nada) para contar lo que ya se ha dicho mil veces.
Envía tus microrrelatos de no más de 200 palabras a elmicrorrelatista@gmail.com. Se irán publicando los mejores.
7 comentarios:
La relación perfecta con la muerte.
¡Muy bueno, Don Carlos!
Un abrazo.
Es mejor amar a la muerte que temerla.
Me ha gustado mucho, Carlos.
¡Muy bueno! no hay que tener miedo, a algo que es inevitable para tod@s algún día (pero que tarde en llegar)
Un saludo
Carlos, muy original esta relación entre el vivo y la parca. Normal que no quiera llevárselo, si se lo pasa bien con él.
Me gusto.
Un saludo.
Con el terror que le tienen todos, que apenas la ven se espantan, que los perros le aullan y los gatos le escapan...
Encontrar a uno que le pellizque la nalga, yo tampoco te llevaría Hombre!!!!
Besos, me encantó
La verdad no había caído en que se refería a la muerte,supongo que son estas horas...
P.D: Cómo te atreves a pellizcarle una nalga a la muerte!
Vaya, tienes que ser encantador para que la muerte se haya enamorado así de tí.
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