Desde la primera viñeta, miró de reojo y descubrió el rostro emocionado del niño leyendo el cómic que tenía entre las manos. No, no podía permitirse el defraudarle, no a él.
Salvó ciudades, peleó contra todo tipo de villanos, liberó inocentes y víctimas, fue herido y se sobrepuso al dolor. Así, empleándose a fondo, avanzó página tras página hasta llegar a la última, la que tenía la viñeta más grande, desde la que vio la satisfacción de su lector hecha realidad en una sonrisa que llenaba su cara.
Llegado ese momento, con tristeza, sintió como si se congelase. El niño cerraba el tebeo y el cielo de papel se venía abajo, hasta que el pequeño, su superhéroe, volviese a abrirlo y obrase el milagro de que su mundo echase de nuevo a andar.
17 comentarios:
Los ojos del lector dan vida a las historias...Sin lectores están muertas.
Besos desde el aire
El niño es su superhéroe, en realidad.
Qué bien. Cuántas veces me he preguntado si los personajes crecen bajo la mirada de los lectores
Para mí, los escritores los dibujan, dan información de los personajes pero... sólo les puede hacer vivir el lector, de hecho, creo que si viven lo hacen dentro de él, en su imaginacion.
El resto son datos, palabras, papel.
Gracias por los comentarios, Luisa.
Genial, Luisa, la idea de que el superhéroe mire al niño y vele por su emoción, como de toy story, y la tristeza del superhéroe nos llega también físicamente. Mi humilde felicitación.
Saludos blogueros
He aquí la magia de los libros
Un saludo,
Bonitos recuerdos cuando los superhéroes eran a los que íbamos a imitar
Muy bueno...
:)
Los personajes son reinventados por los lectores. Así, el superhéroe es sus aventuras cuando alguien lo lee.
Qué mágico, eso es lo que tienen los microrrelatos de bello, su fugacidad.
Besos
¡Ah, los tebeos! ¡Qué pena que me suenen más a mi niñez, y no a la de los niños de ahora!. Tuve esa suerte: de los tebeos del Capitán Trueno y de Mortadelo y etc, pasé a los cómics de Spiderman y etc, y luego de cabeza en 'Crimen y castigo' y literatura adulta con 16 años. Y no desprecio los medios actuales en coherencia con la tecnología (para los que he tenido tiempo de ponerme al día), pero NO fomentan la lectura como entonces, quizá porque, los tebeos y el cine, era lo único que teníamos.
Un abrazo, Luisa
El niño entre viñetas heroicas es la razón de la existencia del personaje. Gracias por rememorar aquellas lecturas de infancia.
Lindo, muy lindo...
Cuando leo mi libro favorito, comienzo feliz, a la mitad ya comienzo a extrañarlo y al final me despido con lágrimas ;).
Estoy de acuerdo con Luis. Cuando he leído el micro me ha entrado una nostalgia... Esas tardes de verano leyendo tebeos, intercambiando con amigos, ese mundo divertido, de aventuras, que nos acercaron a los libros. Yo todavía los compro y los leo. Me divierto como una niña.
Pienso que niño y personaje son superhéroes por igual. Un beso Luisa.
El problema del super héroe era que se negaba a creer en la reencarnación, a pesar de tantas resurecciones.
Luisa, lo leí en tu blog y me encantó. No hay nada como la sonrisa de un niño cuando lee un tebeo o un libro. Y los niños en esta época son los auténticos superhéreos que hacen posibles todas esas aventuras, a pesar de los videojuegos y de la televisión.
Besos
Me encanta este relato de un héroe tan comprometido con una causa tan simple y a la vez tan importante.
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