Daniel Galantz es un fantástico humorista gráfico que los que siguen este blog ya conocerán. Para los que no lo conozcan recomiendo que visitéis su blog GALANTZ.

Pues bien, cual fue mi sorpresa cuando hace unos días abrí mi correo y vi un mensaje suyo en el que me enviaba un bonito diseño para El Microrrelatista. Me gustó mucho y es el que podéis ver en la cabecera de esta página.

¡Gracias Daniel!

miércoles, 12 de octubre de 2016

Sonriendo

Sonriendo

Incapaz de escribir un relato salí a la calle, como siempre, con mi mejor sonrisa. Sonreí a la frutera y en ese momento se dio la vuelta y comenzó a garabatear algo en el papel de las cuentas. La cajera, después de mirarme y mientras pasaba mi tarjeta de crédito, escribió algo en un ticket que otra persona había dejado. En la calle me crucé con mi vecina del tercero, que, dudando, entró en la papelería y sin preguntar cogió un rotulador y una libreta y se puso a escribir algo ante la mirada curiosa del dependiente. Y por último aquél hombre cabizbajo, que tras cruzarse conmigo sacó un bolígrafo del bolsillo y escribió en su periódico. Mi sonrisa va sembrando microrrelatos por todos lados mientras yo me siento ante el ordenador, incapaz de escribir el mio.
Autora: Ana Vidal
Pintura sacada de AQUI

3 comentarios:

manouche dijo...

Eres toda una inspiracion !

Miguel Ángel Pegarz dijo...

Pues a ponerse seria un rato para escribir, que no se escapen las historias.

TORO SALVAJE dijo...

Me ha hecho sonreír la altura.
Me parece un micro genial.
Bravo por ella.

Decálogo para escribir microcuentos (Robado de la Escuela de escritores)


1. Un microcuento es una historia mínima que no necesita más que unas pocas líneas para ser contada, y no el resumen de un cuento más largo.

2. Un microcuento no es una anécdota, ni una greguería, ni una ocurrencia. Como todos los relatos, el microcuento tiene planteamiento, nudo y desenlace y su objetivo es contar un cambio, cómo se resuelve el conflicto que se plantea en las primeras líneas.

3. Habitualmente el periodo de tiempo que se cuente será pequeño. Es decir, no transcurrirá mucho tiempo entre el principio y el final de la historia.

4. Conviene evitar la proliferación de personajes. Por lo general, para un microcuento tres personajes ya son multitud.

5. El microcuento suele suceder en un solo escenario, dos a lo sumo. Son raros los microcuentos con escenarios múltiples.

6. Para evitar alargarnos en la presentación y descripción de espacios y personajes, es aconsejable seleccionar bien los detalles con los que serán descritos. Un detalle bien elegido puede decirlo todo.

7. Un microcuento es, sobre todo, un ejercicio de precisión en el contar y en el uso del lenguaje. Es muy importante seleccionar drásticamente lo que se cuenta (y también lo que no se cuenta), y encontrar las palabras justas que lo cuenten mejor. Por esta razón, en un microcuento el título es esencial: no ha de ser superfluo, es bueno que entre a formar parte de la historia y, con una extensión mínima, ha de desvelar algo importante.

8. Pese a su reducida extensión y a lo mínimo del suceso que narran, los microcuentos suelen tener un significado de orden superior. Es decir cuentan algo muy pequeño, pero que tiene un significado muy grande.

9. Es muy conveniente evitar las descripciones abstractas, las explicaciones, los juicios de valor y nunca hay que tratar de convencer al lector de lo que tiene que sentir. Contar cuentos es pintar con palabras, dibujar las escenas ante los ojos del lector para que este pueda conmoverse (o no) con ellas.

10. Piensa distinto, no te conformes, huye de los tópicos. Uno no escribe (ni microcuentos ni nada) para contar lo que ya se ha dicho mil veces.


Envía tus microrrelatos de no más de 200 palabras a elmicrorrelatista@gmail.com. Se irán publicando los mejores.