lunes, 14 de noviembre de 2011

Abstracto

Caminaba en el vacío como un ave menuda, sin prisa, sutil, como si su cuerpo estuviera hecho de viento.
La tuve en mis manos un instante.

4 comentarios:

  1. Tan etérea es la belleza que acaba tornándose en recuerdo.
    Perfumaste una página con éstas letras.

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  2. Un pequeño instante en el que un sutil cosquilleo me recorrió el cuerpo...un cosquilleo que aún siento cuando el viento me estremece.
    (Tonterías).

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  3. Carlos, me temo que lo mejor de la vida son instantes. Gracias. Un abrazo.

    Ignacio, es la idea, por eso ni siquiera puse una imagen. Gracias por la lectura.

    Laira, esos instantes, esos cosquilleos... bienvenidos. Un abrazo.

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