Avanzas, creces.
Inventas nuevas rutinas, colores, miradas, vidas.
Todo lo nuevo es bienvenido en un intento desesperado por no mirar lo que se acerca.
Cada mañana, abrir los ojos es una aventura, la promesa de un minuto, de una hora, tal vez de una noche más. Desde que te lo diagnosticaron te duele tu sangre contaminada, pero no por eso bajas el rostro, el amanecer está para admirarlo con la frente en alto. Y la vida para recorrerla con el corazón bombeando fuerte.
¡Y pensar que antes de saber el resultado de ese análisis, para vos, la vida no era otra cosa que transitar sin novedades!
Pues sí: triste pero cierto. Sólo ante verdaderas adversidades nos damos cuenta de todo lo que tenemos y no disfrutamos por pensar en chorradas.
ResponderEliminarMe gustó
A veces necsitamos de un golpe fuerte para espabilar.
ResponderEliminarUn abrazo, Escarcha
He recibido uno de esos golpes fuertes y ahora ves la vida y la gente de otra manera. Han cambiado mis prioridades y nada más que deseo tranquilidad.
ResponderEliminarBlogsaludos
cambiar pronto y ya.
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ResponderEliminarCaer al fondo para saber que el cielo es hermoso... Un beso
ResponderEliminarEspero no llegar a ser protagonista de algo así y poder disfrutar de la vida igual...
ResponderEliminarBicos escarcha y muy bueno.