domingo, 9 de octubre de 2016

Una mariposa.


Una mariposa.

Una mariposa libando una margarita que sostienes en tu mano mientras la deshojas, y una lágrima resbalando por tu rostro cae dentro de la flor. Una mariposa bate sus alas saciada por el néctar de una margarita, cuyo último trago ha resultado amargo. Una mariposa vuela triste. Una flor huele a desdicha. Tus ojos se secan.

Autora: Ángeles Sánchez Portero.
Fotografía: AQUÍ
 

4 comentarios:

  1. El último trago en muchas ocasiones tiene demasiados posos y sabe raro. Es lo que pasa cuando queremos apurar tanto...Saludos.

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  2. Será por eso por lo que hay flores que no huelen bien...

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  3. Como decían en no sé qué película "joder, eso es Poesía"

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