EL AMOR ESCRIBE LA HISTORIA
Por lo que más quieras lávate bien esas manos antes de acostarte, que si no das muchas vueltas y no me dejas pegar ojo, se queja cada noche la mujer de Poncio.
Imagen tomada en internet
Jaja, jo, Paloma que forma de verlo, es genial. Este hombre se vió obligado cada nocha a lavarse las manos por su mujer, ella fue la responsable final, jaja.
Muy buen relato porque dice mucho más de lo simple e ingenioso. Esa conciencia que produce insomnio, esa mujer que le da ordenes y que él acepta, como aceptó en la historia del nuevo testamento. Te felicito
Muy Ingenioso.
ResponderEliminaryo solo tengo tres manos.
ResponderEliminarlas demas las perdi por utilizar un jabon a granel.
pero si él es ejemplo 'en lavárselas'
ResponderEliminarsaludos
Bien visto jejejeje.
ResponderEliminarBesos desde el aire
Distinto. Un saludo cordial
ResponderEliminarPobre la mujer de Poncio!
ResponderEliminarSaludos!
Parado en el Abismo
Jaja, jo, Paloma que forma de verlo, es genial. Este hombre se vió obligado cada nocha a lavarse las manos por su mujer, ella fue la responsable final, jaja.
ResponderEliminarUn abrazo,
Muy buen relato porque dice mucho más de lo simple e ingenioso. Esa conciencia que produce insomnio, esa mujer que le da ordenes y que él acepta, como aceptó en la historia del nuevo testamento. Te felicito
ResponderEliminarMuchas gracias por comentar. Saludos
ResponderEliminar