sábado, 3 de diciembre de 2011

UNA BATALLA

Cuando mis padres empiezan a jugar a las peleas, yo me escondo debajo de la cama. Desde allí oigo los insultos y golpes, veo como papá zarandea a mamá y ésta no deja de llorar y gritar. Siempre acaba en el suelo, papá se va con un portazo y yo la ayudo a levantarse.
Hoy ha sido distinto. Menos gritos y sólo se oyó un golpe. Mamá me ha ayudado a salir de debajo de la cama. Sonreía. Creo que esta pelea, la ganó ella.

6 comentarios:

  1. En todo juego hay un momento que hay que decir me planto. Y en este mejor que sea pronto.

    ResponderEliminar
  2. Bien por la mamá.
    Que entrene más el jab, el cruzado de derecha y combinaciones de gancho al hígado, más un veloz rodillazo repentino hacia la zona prohibida aprovechando que no hay árbitro.

    ResponderEliminar
  3. Ahora la mama tendrá que enseñarle al niño el juego de "tendremos que pasar un tiempo separados", o tal vez no...
    tal vez papá se vaya a por tabaco y no vuelva nunca :):):)

    ResponderEliminar
  4. En ese juego, o batalla es donde se muestra la cobardía de algunos hombres y la valentía de las mujeres.

    Un saludo.

    ResponderEliminar
  5. La mujer gana, pero la niña pierde.
    Lástima que algunas veces acabe así.
    La pelea se gana diciendo ¡vasta! y ¡adios!

    Saludos.

    ResponderEliminar
  6. Que no sonría tanto, ese tipo de triunfo es momentáneo, si no lo cree pregúnteselo a su abogado defensor.

    ResponderEliminar

Pon un comentario. Nos gusta que nos leas pero también nos gusta saber que nos has leído.