lunes, 3 de octubre de 2011

Costumbre

Luz nunca perdió la costumbre de hablar con su marido antes de acostarse. Por eso, cada noche a las diez, bajaba las escaleras hasta la cocina, cogía un vaso del armario, abría el congelador; y mientras sacaba el brik de la nevera, se servía leche, y se bebía con lentitud todo el vaso, le contaba lo ocurrido durante el día a José; le decía buenas noches, le soplaba un visible beso estampado sin ruido en su mano izquierda y, cerraba -con parsimonia- la pequeña puerta del congelador.

www.relatosenlinea.wordpress.com

11 comentarios:

  1. Fabulosa técnica que nos revela éste relato acerca de las costumbres de luz de mantener todo fresco. Finalazo.

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  2. No sé quien era más capaz, si el congelador o su viuda esposa.

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  3. Cruel y divertido a la vez. Pero si tanto le quiere que le compre un arcón que esté menos apretado.

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  4. Uaaaauuu, fenomenal !!

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  5. Me gusta, tiene el puntito ese de humor negro que ...

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  6. Esperemos que no se vaya la luz...

    Besos desde el aire

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  7. Muy bueno. De los que te hacen sonreír. Aunque se ve venir con el "abría el congelador" es muy divertido. Y crítico con la incomunicación en la pareja. Felicidades.

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  8. muy buena entrada amigo mio como siempre no esperaba menos un abrazo con cariño

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