Al menos una vez al mes se quita el traje, los tacones y las lentillas. Con gafas, vaqueros y esa camiseta de los Rolling, se tira en los jardines de la Ciudad Universitaria con un libro y un shandwich. Lo malo es que los estudiantes son cada vez más jóvenes y más deslenguados. Ayer uno le llamó "señora" y se quedó tan ancho.
Puck
Puck
No ha perdido nada el micro desde que lo leí en tu blog. Me gusta, Puck.
ResponderEliminarUn beso.
Un par de azotes les daba yo... ;-)
ResponderEliminarAbrazos,
Rocío
Serán deslenguados y... jóvenes
ResponderEliminarUn abrazo
Le hubiese dicho la inmortal frase de Armando Silvestre:Cualquier pendejo tiene 18 años hoy día.
ResponderEliminarSi es que llegas a 50 hablamos.
Un gusto releer este micro que es, en sí mismo, una sonrisa.
ResponderEliminarLa juventud...... ;D
ResponderEliminara mi cuando algun chiquillo me llama de usted lo miro mal jajaja
saludos
¿Quién no se acuerda de esa primera vez... en que, de pronto, un niñato te llamó "Señor"?
ResponderEliminarY es que a esas edades tempranas, uno piensa siempre que los viejos nunca fueron jóvenes.
Estoy con Tor. Me volvió a gustar mucho, Puck.
Besos universitarios...
Hay que rejuvencerse cada día, no una vez al mes... Y a los jovenzuelos ya les llegará la hora de la nostalgia por su juventud, nuestra venganza. El tiempo pasa deprisa e implacable
ResponderEliminar¡Niñatooo!, hubiera lanzado yo... por corresponder jeje.
ResponderEliminarYa sabes que me gustó la primera vez que lo leí y sigo pensando lo mismo :)
Un abrazo.
Gracias por los comentarios. Y saludillos juveniles para todos.
ResponderEliminarPero ya que no hay remedio, pudiera pensar que es la señora más linda que ha pisado los jardines...:)
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