Miguel le prometió que era el hombre que buscaba y que juntos conseguirían todo lo imaginable. Sara aún recuerda aquella frase lapidaria que acabó por convencerla: “juntos seríamos capaces de llegar a la Luna” Hoy, meses después, lo de ser los nuevos Armstrong y Aldrin es una quimera y sus ansias por conseguir lo inalcanzable son un imposible. Todo lo que se proponen les queda demasiado lejos y no llegan ni a fin de mes. Su vida es un quiero y no puedo pero continúan juntos. Nunca llegarán a la Luna pero ella al acostarse sigue viendo las estrellas.
Final feliz con difícil presente,ojalá y llegue a mejorar su situación, tienen los elementos para lograrlo.
ResponderEliminarCarlos de la Parra me temo que todo es cuestión de prioridades.
ResponderEliminarSaludos Carlos
La clave está en seguir viendo las estrellas juntos para mantener la esperanza en el podremos...(art. 3.2 de "Filosofía de lo cotidiano")
ResponderEliminarUn abrazo
Me gusta mucho este micro.
ResponderEliminarUn abrazo, Miguel.
Si continúan viendo las estrellas, el paisaje es lo que importa.
ResponderEliminar¡Eso es amor!. Una forma poética de decir: "Contigo, pan y cebolla"
ResponderEliminar¡Qué bonito!.
Un abrazo Miguel.
Precioso. Amor no es conseguir todos los sueños sino soñarlos juntos
ResponderEliminarSaludillos