miércoles, 22 de septiembre de 2010

SORPRESAS.

Cuando su desesperación llegó al clímax neurótico intentó arrancarse el corazón .Al rajarse el pecho y meter su mano ahí se encontró un huevo de pelícano con el cual se tranquilizó al desayunárselo.

6 comentarios:

  1. Un desayuno con muchas proteinas.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  2. Las cosas del corazón pasan a un segundo plano cuando el estómago está vacio.

    ResponderEliminar
  3. La vida nos da sorpresas, pero más sorpresas nos da la muerte...un huevo de pelícano!! tal vez por eso se sentía raro. Un abrazo.

    ResponderEliminar
  4. Dicen que barriguita llena corazón contento. Pero sin corazón y sin huevo ¿qué hay?

    ResponderEliminar
  5. Cualquiera puede caer víctima de un pedo cerebral.

    ResponderEliminar

Pon un comentario. Nos gusta que nos leas pero también nos gusta saber que nos has leído.