La mayor ilusión de Raimundo desde pequeñito siempre fue ser astronauta, pero como la NASA le cerró las puertas, un buen día se estrelló contra un muro. Raimundo fue feliz.
Para todos los que como Raimundo lamentan no haber formado parte de la NASA debe quedarles el consuelo de lo que se evitaron de reglamentitos pesados e inanes que invariablemete acostumbra cualquier institución mayor. Les fascina robotizar. Lo he vivido en varias. En la vida lo mejor es tener un trabajo donde nadie te resuelle atrás del cuello. También difícil de lograra pero lo vale.
Divertido este relato, Carmela. Hay quien se conforma con ver las estrellas y hay quien lucha por llegar hasta ellas :-D
ResponderEliminarPara todos los que como Raimundo lamentan no haber formado parte de la NASA debe quedarles el consuelo de lo que se evitaron de reglamentitos pesados e inanes que invariablemete acostumbra cualquier institución mayor.
ResponderEliminarLes fascina robotizar.
Lo he vivido en varias.
En la vida lo mejor es tener un trabajo donde nadie te resuelle atrás del cuello. También difícil de lograra pero lo vale.