Hombres.
A mi madre le gustan los hombres. Todos. Ella dice
que siempre ha sido así y “qué le vamos a hacer”. A mí me quiere más, tanto que
ninguno le gusta lo suficiente como para convertirlo en mi padre. Y eso que lo
intenta de veras.
Yo me entero por el ruido. Aunque ya le digo yo que a mí me da igual si no tengo el padre más fuerte de la ciudad. Pero ella venga a hacerles pruebas y el cabecero venga a golpear al otro lado de mi pared. A veces, cuando pienso que ya han fallado, les repite el examen en algún otro momento. Para estar segura, creo. A lo mejor le da pena suspenderlos a todos.
Yo me entero por el ruido. Aunque ya le digo yo que a mí me da igual si no tengo el padre más fuerte de la ciudad. Pero ella venga a hacerles pruebas y el cabecero venga a golpear al otro lado de mi pared. A veces, cuando pienso que ya han fallado, les repite el examen en algún otro momento. Para estar segura, creo. A lo mejor le da pena suspenderlos a todos.
Autora: Rocío Romero
Blog: Contando las horas
Que sera mejor: ningun padre o muchos padres ?
ResponderEliminar¡Menudo examen!
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