domingo, 22 de junio de 2014

MIRADA AL FUTURO DE UN ADAPTADOR ROBÓTICO.

----Dirán lo que quieran. Pero es una mierda éste trabajito de adaptarle cerebros a los robots nuevos.
En particular la parte donde hay que extirpar la masa encefálica del recién fallecido, e incrustarlo en el cráneo robótico y conectarle el engrane que hace mover la mandibular. Si se le zafa a uno el resorte de conección, ésta pieza que engancharía con la quijada, se dispara como aspa de licuadora y queda uno lleno de puré cerebral en la cara y por catorce dólares la hora estaría uno mejor tripulando naves espaciales con todo y que si algo falla ahí se puede quedar uno en órbita en un planeta de politicos, quienes claro está, no harán nada.---

domingo, 1 de junio de 2014

ROBOTICOSAS.

La capacidad de captura de datos y funciones de un robot rebasa por múltiplos de millones a la de cualquier humano; por tal causa fué derivado natural el hecho de cada robot de nueva generación fuése retroalimentándose uno a uno por su antecesor modelo. En tres décadas de robótica dieron saltos evolutivos que incluyeron cirujanos de absoluta precisión por brazos que trazaban cortes perfectos y concluían operaciones exactas al plan computarizado. Eliminaron al conductor o chofer humano en todas las superficies rodantes de transporte público por haber desarrollado un sistema de movilidad con cero accidentes y sustituyeron al profesorado humano en la crianza de niños por demostrar mayor eficacia.
La gente moderna reconoce la capacidad superior del ciudadano robótico y haciéndose a un lado de toda función y labor se dedican al ocio y viven en permanente vacación todo pagado.
Entre los científicos humanos que originalmente impusieron la autonomía de los robots, hubo uno con extrema vocación utópica quien programó que a través de cada nuevo modelo se prioritáse la protección del planeta no importando que hubiése que sobreseir voluntades y conveniencias de personas.
Ocurrió que la humanidad presente atravesó por una expulsión durante la cual los robots los dejaron en una lejana galaxia y al cuidado de uno de éstos hombres mecánicos quien impedía todo intento de salir del modelo Neo-cavernícola de paraíso por desarrollismos industriales.
Desde la estación tierra se vigilaban los progresos de la especie viviente en cuanto a poderes cósmicos que iban adquiriendo dentro del  estilo existencial donde la única supresión del libre albedrío era impedir que unos reinaran sobre otros o en contra del medio ambiente.
Impresionante como la voluntad de un solo hombre siempre logra los cambios trascedentales en las sociedades.