martes, 19 de febrero de 2013

Dar la piel


Se movió. Sí. Se movió. Mirá. ¿Qué voy a hacer? dije en un hilo de voz, como si temiera despertarla del  todo. 
De eso ya hace un mes. Agotado por la fiebre, sólo me resta esperar. No falta mucho para que la serpiente tatuada en mi brazo cierre el círculo que dejará a mi cuello ciego de sangre.




                                                                                                                       ficcionario breve

23 comentarios:

  1. A mí me parece muy terrorífico eso de que los tatuajes cobren vida. ¿Imagínate la venganza del nombre tatuado de su ex, a la que dejó por otra? Aunque el que lleva unas alas tatuadas en la espalda quizás tenga más suerte y salga volando...
    Me ha encantado, Sandra. Un beso.

    ResponderEliminar
  2. Si llegara a ser así más de uno estaría asfixiado de la cantidad de tatus que se llega a hacer.
    Siempre me impactan tus minis.

    Todo un lujo.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  3. ¡Ay, Sandra qué miedo!
    Pero que bien lo has contado...Me ha gustado mucho cómo intriga el qué será.
    Besicos,amiga

    ResponderEliminar
  4. Pensaba tatuarme una anaconda, pero se me han quitado las ganas...
    Si lo que querías era dar miedo, lo has conseguido.
    Hace falta que te diga que me gustan tus chiquitines???
    jajajaja
    Un beso vaaa

    ResponderEliminar
  5. ¡Muy bueno, Sandra! Un tatuaje que es como una solitaria.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  6. Impresionante y muy bueno Sandra. Felicidades.
    Besicos muchos.

    ResponderEliminar
  7. Esa noche, luego de leer "Dar la piel", desperté sobresaltado. Tanteé con desesperación esa zona de mi cuello todavía temblorosa... No...no tengo tatuajes... Alivio... Maldita Sandra, me dije. (¡¡Muy bueno Sandra!!)

    ResponderEliminar
  8. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  9. Es original, me ha gustado mucho.

    Un beso.

    Sakkarah

    ResponderEliminar
  10. Gracias enormes por pasar a leer por aquí este micro con un tatuaje de lo más perturbador.
    Besos van para Sara, Francisco, Carmencica, Toro, Rosy, Pedro, Nani,Rashek, Toño y Carmen.

    ResponderEliminar
  11. Es como una buena paranoia de un despertar desvelado en lunes.
    Abres una cascada de posibilidades entre los millones de tatuajes; ésto es lo que más me gusta de tu cuento. El poder de la inercia de la imaginación que provoca leer ésto te puede lanzar a instancias tan extrañas como despertar en una sala de operaciones y que Marilyn Manson sea tu cirujano.

    ResponderEliminar
  12. Tal vez, lo único que quería la serpiente era rascarse la cola...
    Genial micro San!
    Besos!!

    ResponderEliminar
  13. Cuando la vida avanza uno quisiera sacarse de encima "ciertos tatuajes". Pero no se van y a veces hasta le damos la vida.
    ¡Muy bueno, por cierto!

    ResponderEliminar
  14. Es cierto, Carlos, la inercia de la imaginación. A ese lado apuntaba. Gracias por tu lectura.

    Etienne, que la comezón lo deje vivo al protagonista por lo menos. Gracias por pasar a leer por aquí.

    Es cierto, Andrea. Las serpientes tatuadas siempre me han impresionado y las vivas, aún más.

    Beso grande para todos.

    ResponderEliminar
  15. ¡Que susto Sandra! Ya tengo miedo hasta de los lunares en la piel.
    Un relato estupendo, Saludos

    ResponderEliminar
  16. Sandra:
    Una horrible sensación debe ser eso de ver que tu tatuaje cobra vida.
    Me pasarán mil cosas feas, pero ninguna por un tatuaje.
    No sé por qué me puse a pensar en Axolotl, de Cortázar; como si el tatuaje te robara la conciencia y te convirtieses en el adorno y él en tu cuerpo todo.
    Te felicito.
    Un gran abrazo.

    ResponderEliminar
  17. Gracias, Beto, por la lectura. Los lunares si crecen o cambian de forma son e temer y no es cuento.

    Arturo, tampoco tengo tatuajes.
    Me quedo pensando en esa conexión con "Axolotl", estremecedor si fuera así.Gracias por pasar por aquí.

    ¡Abrazos van, Beto y Arturo!

    ResponderEliminar
  18. Mientras no desbarranque de la piel, vamos bien.
    Gracias por tu lectura, Diego.
    Saludos van

    ResponderEliminar
  19. Me ha parecido un micro excelente Sandra. Enhorabuena

    Besos desde el aire

    ResponderEliminar
  20. Muchas gracias, Rosa, por tu lectur.
    Abrazo admirado va.

    ResponderEliminar
  21. Una fantasía que se torna realidad. Da para un corto asfixiante de terror.

    ResponderEliminar
  22. Hace un tiempo que "me daba vueltas" la idea de una serpiente tatuada que subiera desde la pierna hacia el cuello. Y el tema se ve que no me deja porque esta semana subí unas variantes al blog.
    La idea de un corto de terror sería impactante.
    Gracias,Cybr, por pasar a leer.
    Saludos admirados hacia tu escritura van.

    ResponderEliminar

Pon un comentario. Nos gusta que nos leas pero también nos gusta saber que nos has leído.