lunes, 17 de septiembre de 2012

LAMENTABLE PÉRDIDA

Entró a la capilla funeraria directo hacia el ataúd, sin protocolos ni discreción. El sonido presuroso de sus tacones contrastó con los sollozos amainados. Usaba deliberadamente el vestido rojo entallado y corto, con una torera de encaje negro sobre los hombros desnudos. Sintió las miradas de los deudos, fiada en que nadie la reconocía, a excepción de ella... por alguna foto quizás. Tomó un respiro profundo ante los cuatro escalones, oprimiendo una rosa blanca entre sus senos. Cerró los ojos. "Tú mueres y yo descanso en paz, querido". Subió elegantemente y se inclinó para mirarlo por última vez. ¡No era él! ¿Su hermano, o alguno de sus primos? Giró conmocionada buscando entre los rostros juiciosos. Entonces lo reconoció de pie a la izquierda, abrazando a una muchacha de  muleta y collarín. Él la miraba con un gesto ofuscado. ¡Qué atractivo le parecía cuando estaba molesto! 

8 comentarios:

  1. Bravo Yunuén por ésta mirada a una representante de la pasión desmedida, con su falta de límites.
    Creo que ésto me aclara que el mundo está mucho más loco de lo que yo pensaba.

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  2. Excelente técnica, como decía Hemingway, del iceberg. Un cuento debe decir un 10%, lo demás debe quedar a criterio del lector.
    Me gustó, si señor.
    Besos.
    HD

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  3. Siempre quise un vestido rojo. Para lo que fuera: para todo tipo de ocasiones. Bodas, bautizos, comuniones.

    un saludo,

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  4. Yunuén, tu micro se hermana con el mío de Cuervos. Muy bien llevado, y un final que no esperas, pero posible.

    Un abrazo.

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  5. Que situación más incómoda!

    Me gustó mucho :)

    Saludos!
    Parado en el Abismo

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  6. Gracias amigos por sus comentarios, es un micro sencillo pero que me gustó mucho.

    José Manuel, ¿ya ves que sí? ¡te lo dije!

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