sábado, 7 de enero de 2012

Todo controlado.


- Hola, ¿qué hacen todas esas personas en tu plaza?
- Se la he cedido para que protesten contra mi, y expongan sus peticiones.
- Has hecho bien. ¿Y este muerto?
- Ah, ese, lo tuve que matar.
- ¿Y eso?
- Tenía un punto de vista distinto a estos, e incluso estaba a punto de convencer a alguno que otro.
- Entonces, estaba de tu lado.
- No, no. Estaba contra mi.
- Pues no lo entiendo.
- No pasa nada, corre, ve a la plaza a aportar ideas.

Torcuato González Toval.

6 comentarios:

  1. En estos tiempos que corren tener ideas, pensar, es muy, muy peligroso. Excelente. Un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Un texto bastante, bastante diciente Torcuato. Mis respetos y felicitaciones.

    ResponderEliminar
  3. Los tiranos en su ambición de permanencia siempre asesinarán a quienes tienen distinta opinión.
    Excelente retrato.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  4. Leí este relato en tu blog hace unos meses y me gustó. Sin embargo, ahora que me han abierto los ojos a un par de famosos ejemplos nacionales de rebelión prefabricada, pantomímica, -exitosos en contraste a las masacres de resistencias auténticas- el micro me sabe más amargo, y lo comprendo mejor.

    ResponderEliminar
  5. Gracias por leer y comentar.

    Yun, tienes razón, muy amargo.

    ResponderEliminar
  6. Un golpe de realidad...

    Besos desde el aire

    ResponderEliminar

Pon un comentario. Nos gusta que nos leas pero también nos gusta saber que nos has leído.