De un tiempo a esta parte siento que nuestra convivencia ha perdido algo, y lo peor es que tengo un mal presentimiento; ya sé que vas a argumentar con la velocidad de las balas que ese tipo de pálpitos no es frecuente entre nosotros, pero tú tienes derecho a saberlo y yo a decírtelo. Cuando irrumpí en tu vida, un día frío de invierno, me hiciste sentir especial; formábamos una pareja atractiva más gracias a tus encantos que a los míos justo es reconocerlo, una unión sólida a los ojos del mundo.
Recuerdo con cariño aquellos primeros días, tus caricias, tus besos, la musicalidad de tu voz hablando de mí con ese orgullo mal disimulado y tu risa, esa cascada fresca que llenaba el aire. Tras la euforia inicial en la que sólo estabas feliz a mi lado, los arrumacos fueron disminuyendo aunque tus miradas cómplices me mantenían en vilo. Después tus rodajes, tus ensayos, tu mundo de película se interpuso entre los dos.
Ahora mis más negros augurios me susurran que pronto otro ocupará mi lugar relegándome a un rincón en tus más bellos recuerdos. No pretendo emular tus excepcionales dotes dramáticas, esas que vuelven loca a la crítica y que ahora te han puesto en el disparadero hacia el estrellato, pero estoy seguro que pronto conquistarás el corazón de miles de espectadores, y un día, casi sin darte cuenta, estarás en el punto de mira del individuo más brillante y deseado de tu profesión.
Aunque siempre me quedará la satisfacción de haber sido el primero, Óscar, con su pátina dorada, su estilizada figura y su encanto, siempre sabrá que fue a mí, a mi rostro pensativo y a mi fosco cabello al primero que besaste, y eso sé por experiencia que duele mucho, demasiado.
Paloma Hidalgo Díez
http://unlibroesunjardndebolsillo.blogspot.com
La convivencia se pierde con lo cotidiano y no precisamente con las grandes cosas, son las pequeñas cosas cotidianas que hacen que la convivencia pierda algo. Menos mal, que siempre sabrá que fue el primero.
ResponderEliminarBonito micro.
Saludos cordiales.
Algunas veces, es mejor ser el último y no el primero.
ResponderEliminar¿Qué significa arrumaco?
ResponderEliminarLa Boca del Ello
Arrumacos son demostraciones de cariño, pueden ser realizados por medio de gestos o de palabras.
ResponderEliminarSaludos
Paloma, me ha encantado el inicio de esa historia de amor. Era tan tierna. Luego me has sorprendido al ponerle voz al Goya, y lo he entendido muy bien, pues el pobre ahora se siente solo, desdichado y hasta utilizado. La suerte suya creo que radica que todos los años cambia de pareja. Siempre con aires grandiosos. Como tu relato.
ResponderEliminarMe encantó. Un abrazo muy fuerte.
El Oscar podrá ser muy importante y muy estadounidense pero el Goya...siempre será lo más íntimamente ligado a nosotros. Además, el primer amor nunca se olvida,¿no? Dile a ese Goya que no se preocupe, que el corazón de su dueña siempre le pertenecerá.
ResponderEliminarBesos, Paloma. Muy original.