viernes, 29 de noviembre de 2013

Relato negro

El remordimiento lo oprimía. Decidió liberarse de ese yugo narrando en un folio su escabroso crimen. Su prosa era oronda en algunos detalles y apenas sugerente en otros, con el fin de no revelar la identidad de su víctima. Publicó su confesión en bitácoras y redes sociales, a la espera de manifestaciones de repulsa, críticas y amonestaciones; sin embargo, solo obtuvo elogios al realismo de su texto y la promesa de que llegaría a ser un excelente cuentista. Ahora perpetra actos cruentos todas las semanas, pero ya no escribe sus confesiones por arrepentimiento, sino para participar en concursos. Y ganar premios.



jueves, 28 de noviembre de 2013

EFECTO BUGATTI.

---Carmelita ,que te espera al frente el joven del Bugatti Veyron--- ---Voy corriendo madre.--- El rugido del Bugatti al arrancar quemando llantas hizo apagar la voz de la madre que gritaba desde la casa: ---Hija,hija. Has olvidado ponerte las bragas.---

martes, 26 de noviembre de 2013

El dinosaurio (versión del Director)

El dinosaurio (versión del Director)

por Héctor Ugalde (UCH) 
Música suave de fondo. 
Encuadre de plano general. 
Se ve una casa desde el jardín. Una ventana entre las ramas y hojas de un árbol. 
Dentro de la habitación. Paneo a la izquierda en la recámara. Toma aproximándose a la cama. Una persona durmiendo. 

Cámara fuera de foco. Primer plano. Acercamiento al rostro. 
El hombre durmiendo abre un ojo, luego el otro. 
Voz en off: "Cuando despertó". 

Asombro en la cara. Música de efecto dramático. 
",". 
Pausa. 
Alejamiento. 

Barrido a la derecha. 
Desenfoque.
Música: Tema principal. 

Toma del dinosaurio. 
Enfoque. Voz en off: "el dinosaurio seguía allí". 

Desvanecimiento de la imagen. 
Palabra "FIN". 

Música suave final. 
Van apareciendo los créditos desplazándose lentamente. 

Tomas falsas de la filmación. 

Agradecimientos para la realización de esta versión. 

http://abrapalabramagica.blogspot.mx/


domingo, 17 de noviembre de 2013

¿Solamente una vez?

- Había una vez...
- ¿Solamente una vez?
- No... Ha habido demasiadas veces en que una pareja de jóvenes se han sentido príncipes y princesas.
- ¿Demasiadas veces?
- Así es. Y ha habido muchas veces que se han enamorado.
- ¡Muchas veces!
- Y hasta algunas veces han luchado contra dragones, la familia y otros problemas.
- Algunas veces.
- Aunque pocas veces han despertado. 
- Mmm... Pocas veces... 
- Y ninguna vez han sido felices para siempre. 
- ¡Vaya! ¿Ninguna vez? 
- Bueno... Había una vez que sintieron que vivían en un cuento de hadas y creyeron que serían felices para siempre. 
- Entonces sí: ¡Había una vez!


domingo, 10 de noviembre de 2013

El Director


Dirigía la orquesta con inusual maestría. Verlo de espaldas, semejaba a un ave en posición de remontar vuelo. Supuse alas en sus brazos, mientras su batuta mágica despertaba la novena sinfonía de Beethoven.

Escuchar esa música arrancaba emociones latentes en el auditorio. Mi alma danzaba liberada y trepaba hasta el escenario, vibrando junto con las notas musicales que inundaban, luminosas, el entorno de los instrumentos formando un arco iris musical, al que veía sin ver. Mi rango en la familia me había hecho partícipe de los beneficios que otorgaba esa pertenencia y desde la primera fila seguí el espectáculo tal como si me desplazara en una nube melodiosa. El último acorde, síntesis perfecta del autor, marcó el final de la actuación y de mi embrujo. Un bullicioso aplauso general estalló en el teatrino. Me acerqué lentamente, apoyada en mis muletas, convertidas en parte de mi pobre cuerpo. Me acerqué lo que más pude al escenario y le entregué la rosa que había llevado para él. Como siempre, se acercó gentilmente para tomarla y agradeció con una mueca, parecida a la sonrisa de los que no sonríen nunca. Una vez más me topaba con esos increíbles ojos celestes. Fue suficiente. Mi ego estaba satisfecho. Ésta, como las veces anteriores y seguramente las que sucederían me contarían la misma historia.

miércoles, 6 de noviembre de 2013

AUSENCIA DE NEUROSIS.

Me creen neurótico porque me doy cuenta de que una novela perfecta debe tener tal equilibrio de contenido que se pueda leer de primera a última página y de regreso leyendo los textos al revés, en orden desde abajo hacia arriba, terminando de narrar todo cuando llegue al punto donde se inició la lectura. El tomo por igual debe constar de 777 páginas por razones lógicas. Mi auténtica frustración neurótica deriva de que no soporto el no saber hablar chino y tampoco hago algo al respecto. Y es que estar escribiendo la novela en éste formato me ha llevado todo el tiempo libre de mi vida.Lo bueno es que voy a terminar la semana entrante. Lo malo es que la escribí en sánscrito y nadie la va a entender.